La bomba es capaz de deshacer barcos en tiempo récord tras ser disparada a kilómetros de distancia
NotMid 12/05/2022
Ciencia y Tecnología
Estados Unidos es una de las potencias internacionales en cuanto al desarrollo de armas. Así lo han demostrado con el lanzamiento de una bomba desarrollada por las Fuerzas Aéreas del país norteamericano que podría cambiar definitivamente la manera en la que se batallan las guerras navales.
Casi tan efectiva como un torpedo, la llamada bomba Quicksink, tiene la capacidad de destruir un carguero entero en apenas unos segundos. El Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea estadounidense (AFRL) demostró esta nueva herramienta armamentística que se lanza desde un avión y cuenta con diversos sitemas de guiado, a través, de una prueba videograbada. En esta se muestra como este artefacto destruye con éxito un buque de grandes dimensiones, en el Golfo de Eglin.
Con el desarrollo de esta nueva bomba guiada experimentalmente, el ejército de los Estados Unidos pretende crear un nuevo modelo de armamento antibarcos de bajo costo, que permita destruir una embarcación en cuestión de segundos. “Quicksink es una respuesta a una necesidad urgente de netralizar las amenazas marítimas a la libertad en todo el mundo”, dijo el Coronel Tony Meeks, director de la Dirección de Municiones de AFRL. “Los hombres y mujeres de esta dirección encuentran constantemente formas de resolver los mayores desafíos de nuestra nación”.
Este arma podría convertirse en una revolución absoluta en cuanto a armamento militar en guerras navales, gracias a su especial funcionamiento que logra fijar un objetivo a kilómetros de distancia. Esta bomba cuenta con un sistema de navegación basado en GPS en la parte trasera del artefacto, mientras que en la parte delantera presenta un Buscador de Arquitectura de Sistemas Abiertos de Armas (WOSA), que permite localizar precisamente objetivos y/o amenazas marítimas. Esto se logra a través de radiofrecuencia, permitiendo al arma encontrar su objetivo, por mas de que este se encuentre en movimiento.
El programa Quicksink tiene como objetivo mejorar los recursos del ejército estadounidense y proporcionar opciones con el fin de neutralizar las amenazas marítimas, especialmente en cuanto a la eficacia en comparación con otras armas guiadas, como por ejemplo los torpedos. “Los torpedos de peso pesado son eficaces [al hundir barcos grandes], pero son caros y están empleados por una pequeña parte de los activos navales”, dijo Andrew Swanson de la división TES de programas avanzados. “Con Quicksink, hemos demostrado una solución de bajo costo y más ágil que tiene el potencial de ser empleada por la mayoría de los aviones de combate de la Fuerza Aérea, proporcionando a los comandantes y combatientes mas opciones”.
Quicksink lista para ser utilizada
El director del programa, Kirk Herzog, ha admitido que Quicksink “es único en el sentido de que puede proporcionar nuevas capacidades a los sitemas de armas existentes y futuros del Departamento de Defensa, dando a los comandantes combatientes y a nuestros líderes nacionales nuevas formas de defenderse de las amenazas marítimas”.
Desde medios especializados en el tema como The War Zone, indican que este tipo de bomba solo tiene un alcance de 25 kilómetros, una caracteristica que reduce considerablemente su uso en situaciones de guerra. De todas maneras, tambien apuntan que a las municiones de ataque directo (JDAM) que se utilizan para Quicksink, se les pueden añadir una serie de particularidades para ampliar el rango de alcance, convirtiéndolas en armas muy versátiles y más barates que los torpedos regulares.
Agencias