Los socialistas acusan al PP de “no reconocer la legitimidad de Sánchez y el resultado electoral”
NotMid 03/04/2024
ESPAÑA
El Senado, dominado por la mayoría absoluta del PP, ha reprobado con 149 votos a favor, 114 en contra y una abstención al ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, en un debate que ha estado centrado sustancialmente en la proposición de ley de Amnistía, su constitucionalidad, sus trámites y su objetivo. La Cámara ha puesto de manifiesto una vez más la fractura que esta iniciativa provoca en la política, en los ámbitos jurídicos y en la sociedad. Una división clara entre el Gobierno y sus socios nacionalistas e independentistas y la oposición concentrada en PP y Vox.
La moción, sobre el papel, planteaba reprobar al ministro por sus afirmaciones minusvalorando al Senado como representante, al igual que el Congreso, del pueblo español y por tanto de la soberanía nacional, así como su filtración del informe preliminar de la Comisión de Venecia sobre la amnistía con el fin, según el PP, de ofrecer del mismo una “interpretación manipulada conforme a los intereses del Gobierno”.
El debate se ha convertido, sin embargo, en un nuevo rifirrafe sobre la iniciativa auspiciada por el Ejecutivo mediante una proposición del Grupo Socialista pactada con los propios beneficiarios de la amnistía a cambio de sus votos para sacar adelante la investidura de Pedro Sánchez.
El representante del PP, Antonio Silván, ha justificado la moción de reprobación del ministro repasando sus afirmaciones de “falta de respeto” al Senado, considerándolo, según los populares, “menos soberanía nacional” que el Congreso. Silván ha acusado a Bolaños de “soberbia e ignorancia”, un cóctel del que únicamente resulta la “mediocridad”.
A partir de ahí, la amnistía ha ocupado el centro de la discusión. Para el PP, su objetivo es meridiano: “Mantener a Sánchez en el poder”. Todos los demás argumentos que ahora proporciona el Gobierno para defender lo que hasta hace unos meses consideraba inconstitucional, es sólo un engaño. “Sánchez ha hecho de este Gobierno el jardín de las mentiras y Bolaños es su jardinero mayor”, ha sentenciado Silván.
Su compañero Luis Martínez-Portillo ha seguido por la misma senda acusando al ministro de Presidencia de “utilizar y manipular las instituciones a su antojo” e incluso de “vulnerar la Constitución con el único propósito de satisfacer a sus socios independentistas”.
Los socialistas han replicado acusando al PP de “no reconocer la legitimidad de Sánchez y el resultado electoral” y estar centrados en la “estrategia de la crispación, el ruido y la polarización”. Antonio Magdaleno ha insistido en que el Senado se desacredita por el uso partidista que hace el PP de la Cámara y ha citado la reforma exprés del Reglamento promovida por los populares, el conflicto de atribuciones planteado contra el Congreso y la “manipulación” de la Comisión General de las CCAA “para que los presidentes autonómicos del PP expresen su opinión en contra la ley de amnistía”. “Esto”, se ha preguntado, “¿es incompetencia o mala fe?”. El senador socialista ha insistido en que el PP no pretende reprobar a Bolaños sino “las políticas progresistas del Gobierno”.
La representante de Vox, Paloma Gómez, alineada con la propuesta de los populares, ha hecho hincapié en que el Gobierno vive en un “mundo de autoengaño” considerando amigos a los que “sólo son beneficiarios”. “No hay ningún mérito”, ha dicho, “en ceder siempre y en todo”. En opinión de Vox, la Comisión de Venecia, en contra de lo que cree el Gobierno, no avala la ley de Amnistía y para sostener esta afirmación su senadora ha mencionado todos los inconvenientes que su informe plantea a la proposición de ley.
Uxue Barcos, de Izquierda Confederal, ha reconocido que la Comisión de Venecia vierte críticas “y profundas” a la proposición de ley de Amnistía, pero, en su opinión, “no la invalida”. La senadora ha lamentado la guerra de informes jurídicos en torno a la proposición de ley pero ha insistido en que la misma responde al deseo de la “mayoría absoluta legítima” del Congreso. De la misma manera que ha defendido esa mayoría de la Cámara Baja y sus decisiones, ha criticado la del Senado porque, ha dicho, sólo pretende “deslegitimar al Gobierno”.
El PNV, por su parte, considera que la reprobación es un ejemplo de la “frustración del PP por no haber conseguido el Gobierno de la nación”. Según Estefanía Beltrán, los populares “utilizan el Senado como su feudo particular” y ha calificado su moción de “absoluto fariseísmo”
Junts se ha quejado de que en la Cámara de representación territorial sólo se hable de Cataluña para atacarla. Su senadora, Teresa Pallarès, ha culpado al PP de tratar de entorpecer la tramitación de la amnistía y ha finalizado su intervención recordando que el objetivo de su formación es la independencia.
Desde ERC, Josep María Reniu ha calificado el debate de “pim pam pum” y ha reprochado a los populares que utilicen el senado para “aplicar el rodillo de sus intereses partidistas y espurios”
Agencias