Así lo asegura un nuevo estudio científico al sugerir que la vida podría haber evolucionado en el cosmos mucho antes de lo que se pensaba
NotMid 17/03/2025
Ciencia y Tecnología
Cuando nos preguntamos si habrá vida en el universo, más allá de la Tierra, todos coincidimos que seguramente sí en alguno de los planetas que orbitan los miles de millones de soles que existen en las distintas galaxias.
Pero a eso hay que agregarle el tiempo, un factor clave para entender la inmensidad del cosmos. Y un nuevo estudio está cambiando la forma en que entendemos la historia de la vida en él, a partir de la existencia del agua.
Investigadores de la Universidad de Portsmouth han descubierto que este elemento esencial para la vida pudo haber estado presente en el universo apenas 100 a 200 millones de años después del Big Bang, miles de millones de años antes de lo que se pensaba.
Vapor de agua en halos primordiales, detectada por poderosos telescopios espaciales (Nature Astronomy)
Este hallazgo, publicado en la revista Nature Astronomy, sugiere que las condiciones para la formación de planetas habitables y, potencialmente, para la vida, surgieron mucho antes de lo que la ciencia había estimado hasta ahora.
El agua es un compuesto fundamental para la vida tal como la conocemos, y su origen en el universo fue un misterio que los científicos han intentado resolver durante décadas. Hasta ahora, se creía que la formación de agua estaba estrechamente ligada a la evolución de las galaxias y que había aparecido mucho después del Big Bang.
Sin embargo, el equipo de investigación liderado por el astrofísico Daniel Whalen demostró que el agua pudo haber existido en las primeras etapas del cosmos, mucho antes de la aparición de las primeras galaxias.
Pişmiş estudió, entre otros, la cinemática de galaxias, la nebulosa H II, la estructura de cúmulos estelares abiertos, y de nebulosas planetarias. Compiló el catálogo Pismis de 22 cúmulos estelares abiertos, y 2 cúmulos globulares en el hemisferio sur Crédito: Wikipedia/ NASA Hubble
Las simulaciones realizadas por los científicos revelaron que las primeras moléculas de agua se formaron tras las explosiones de las primeras estrellas, conocidas como supernovas de Población III. Estas estrellas, pertenecientes a la primera generación del universo, desempeñaron un papel crucial en la producción de elementos más pesados, como el oxígeno, que luego se combinó con hidrógeno para formar agua.
“El oxígeno, forjado en los corazones de estas supernovas, se combinó con el hidrógeno para formar agua, allanando el camino para la creación de los elementos esenciales necesarios para la vida”, explicó Whalen en el estudio.
Antes de la formación de estas estrellas, el universo primitivo estaba compuesto principalmente de hidrógeno, helio y litio, elementos demasiado simples para formar agua. Sin embargo, con las primeras explosiones estelares, las condiciones cambiaron radicalmente.
Los investigadores analizaron dos tipos principales de supernovas: las de colapso de núcleo, que producen una cantidad moderada de elementos pesados, y las supernovas de inestabilidad de pares, que generan una cantidad mucho mayor de estos materiales. Ambas, según el estudio, enriquecieron el gas circundante con agua, dando lugar a densas regiones ricas en este compuesto.
Las simulaciones realizadas por los científicos revelaron que las primeras moléculas de agua se formaron tras las explosiones de las primeras estrellas (NASA, ESA, IMAD PASHA YALE)
La presencia de agua en estos densos núcleos de gas sugiere que las primeras galaxias surgieron en un entorno donde el agua ya existía, un hallazgo revolucionario que plantea la posibilidad de que la vida podría haberse desarrollado miles de millones de años antes de lo que se pensaba. “Esto implica que las condiciones necesarias para la formación de la vida existían mucho antes de lo que imaginamos; es un avance significativo en nuestra comprensión del universo primitivo”, añadió Whalen.
“Las supernovas primordiales (o de población III) fueron los primeros motores nucleo sintéticos del Universo y forjaron los elementos pesados necesarios para la posterior formación de planetas y vida. Se cree que el agua, en particular, es crucial para el origen cósmico de la vida tal como la conocemos, y modelos recientes demostraron que el agua puede formarse en gases de baja metalicidad, como los presentes a altos corrimientos al rojo”, precisa el estudio científico.
“Además de revelar que un ingrediente primario para la vida ya existía en el Universo 100 a 200 millones de años después del Big Bang, nuestras simulaciones muestran que el agua fue probablemente un componente clave de las primeras galaxias”, concluyó la investigación.
Búsqueda de vida en otros planetas
Este concepto artístico visualiza un mundo super-Neptuno orbitando una estrella de baja masa cerca del centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea. (NASA/JPL-CALTECH/R. HURT CALTECH-IPAC)
El descubrimiento no solo cambia la línea temporal del agua en el cosmos, sino que también tiene implicaciones para la búsqueda de vida en otros planetas. Si el agua estuvo presente en el universo desde sus primeras etapas, significa que los planetas habitables pudieron haber aparecido mucho antes de lo que creíamos.
Esto amplía enormemente el rango de posibilidades en la búsqueda de vida extraterrestre, ya que los astrónomos ahora pueden considerar sistemas estelares mucho más antiguos como potencialmente habitables.
El estudio también plantea preguntas fascinantes sobre la evolución química del cosmos. Si el agua existió en las primeras nubes de gas donde se formaron las primeras estrellas y planetas, significa que la química de estos sistemas tempranos era más compleja de lo que se pensaba. Además, podría haber influido en la formación de planetas rocosos con condiciones favorables para la vida.
Miles de millones de soles en el universo y la posibilidad de la existencia de agua en sus planetas (EUROPA PRESS)
Para validar aún más estos hallazgos, el equipo de investigación espera que el telescopio espacial James Webb proporcione observaciones adicionales. Diseñado para explorar el universo primitivo, este telescopio podría detectar señales de agua en galaxias extremadamente antiguas, confirmando así las predicciones del estudio.
El descubrimiento de que el agua se formó en el universo primitivo revoluciona nuestra comprensión de la evolución cósmica y la posibilidad de vida en el cosmos. Con cada nuevo hallazgo, la historia de nuestro universo se vuelve más rica y sorprendente, desafiando nuestras ideas previas y expandiendo los límites de lo que sabemos sobre nuestros orígenes.
La existencia de agua en las primeras etapas del universo abre un abanico de posibilidades para la astrobiología y la exploración del espacio, marcando un nuevo capítulo en nuestra búsqueda de respuestas sobre el lugar de la humanidad en el vasto cosmos.