NotMid 15/02/2023
La Noticia en Mil Idiomas
Michael Oliver es un australiano que se gana la vida buscando cosas que la gente pierde en las playas de Sydney. Por un precio de 150 dólares australianos (97 euros) por dos horas de trabajo, se puede contratar a Oliver para que busque lo que sea. Para ello, según relata en Insider, utiliza un equipo muy sofisticado, que incluye detectores de metales y material de buceo. Ha llegado a encontrar (y a devolver a sus legítimos propietarios) joyas valoradas en 33.000 euros. Lo que más pierde la gente es el anillo de matrimonio (¿será algo freudiano?).