La Comisión Europea considera que la propuesta es compatible con los valores y principios comunitarios y remite el texto a las autoridades nacionales competentes
NotMid 14/11/2023
EUROPA
La Comisión Europea ha decidido este martes no intervenir la ley de amnistía al considerar que es perfectamente compatible con los principios y valores comunitarios. Los casos de lawfare han quedado excluidos de la propuesta y el texto salva los intereses financieros de la Unión Europea (UE). En este sentido, Bruselas considera que la evaluación de la norma corresponde a las autoridades nacionales competentes y descarta a priori la posibilidad de actuar contra la medida de gracia. El Gobierno en funciones había enviado la propuesta registrada por el PSOE en el Congreso poco antes de solicitar una reunión con el comisario de Justicia, Didier Reynders, para explicarle su contenido.
La respuesta de Bruselas tumba la última baza del Partido Popular para entorpecer la investidura. El líder de la formación, Alberto Núñez Feijóo, había pedido la intervención de los órganos comunitarios argumentando que la amnistía atentaba contra la democracia española y podía suponer una “involución”. Hace unas horas, el jefe de los populares convocaba a los corresponsales de los medios europeos bajo el lema Help Spain con el objetivo de “internacionalizar” el malestar social. La Comisión Europea, que este lunes reconocía su “preocupación” por el contenido del texto, ha considerado tras una primera lectura que no existe colisión alguna con las normas de la UE, según ha avanzado Europa Press.
Bruselas ha reconocido que se trata de un “asunto doméstico” y seguirá analizando el texto durante los próximos días, aunque sus “preocupaciones” han desaparecido después de revisar el texto. El segundo artículo de la propuesta legislativa detalla los supuestos que quedan fuera de la futura amnistía, entre ellos, los delitos que puedan afectar a los “intereses financieros de la Unión Europea”. El borrador tampoco incluye ninguna referencia expresa al lawfare, como sí ocurría en el pacto de los socialistas con Junts per Catalunya. El texto todavía sigue en fase de estudio y los servicios jurídicos emitirán una opinión formal en los próximos días.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante la reunión con los corresponsales extranjeros para abordar la amnistía. (Europa Press)
La propuesta registrada por el PSOE ciñe los actos amnistiados a los“vinculados directa o indirectamente con el denominado proceso independentista”, es decir, todos los delitos de usurpación de funciones públicas, malversación, desobediencia, desórdenes públicos y prevaricación. El texto deja fuera otras causas como el blanqueo de capitales, la organización criminal, la asociación ilícita y la falsedad documental. Las fuentes consultadas por Europa Press reconocen que, de haber existido referencia alguna al lawfare, las instituciones comunitarias hubieran tenido que intervenir.
La ofensiva de Feijóo pincha en Bruselas
La Comisión Europea ha aprovechado para recordar que el Ejecutivo comunitario no puede convertirse en un “actor político” en los Estados miembros, como venía pidiendo la bancada popular. Bruselas puntualiza que las motivaciones políticas para aprobar una ley de amnistía no tienen relevancia para las instituciones europeas porque son los órganos nacionales quienes tienen que someterlas a juicio. Asimismo, las fuentes consultadas por Europa Press han descartado cualquier paralelismo con el caso de Rumanía, donde se barajó la posibilidad de intervenir si el Gobierno concedía la medida de gracia al líder del Partido Socialdemócrata, condenado a tres años y medio de cárcel por abuso de poder.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha convocado este martes a la prensa internacional para hacer llegar la indignación de su partido a todas las capitales posibles. Los populares mantenían la esperanza de que Bruselas frenase al PSOE y revocase la futura ley de amnistía, que pretende dar carpetazo a las causas pendientes del procès. La Comisión Europea, sin embargo, se ha desvinculado de Génova. El comisario Didier Reynders había pedido información “detallada” sobre el contenido del texto y el Gobierno ha cumplido con su “compromiso” al remitir la propuesta. El Partido Popular seguirá presionando, pero la ofensiva tiene todas las papeletas para pinchar.
Agencias