Vivió la gloria y ocaso de los nuevos medios ‘millennial’, y analiza cómo la nueva era del periodismo se hundió en su nuevo libro, ‘Traffic’: “Las plataformas no eran tan infalibles como parecía”
NotMid 17/05/2023
Estilo de Vida
La foto de perfil de Ben Smith en Twitter (la misma que ilustra esta entrevista) tiene mucho de nostálgica. Con una sonrisa de oreja a oreja, luce orgulloso un chaleco rojo de prensa con un logo serigrafiado en el pecho, a la altura del corazón: BuzzFeed. Quien fuera director de la división informativa de aquel gigante que reconfiguró internet a base de gatitos, listas y tests está estos días promocionando su nuevo libro, Traffic, que relata desde dentro el nacimiento, gloria y fracaso de los medios digitales que no sobrevivieron al cambio de década.
Como en una metáfora retorcida, 13 días antes de que la obra saliera a la venta Buzfeed News anunciaba que echaba el cierre.
La trama de este ensayo escrito como una novela -el argumento no deja otra opción- narra la rivalidad entre Nick Denton, fundador del blog derechista Gawker, y Jonah Peretti, fundador del portal progresista BuzzFeed, en la guerra encarnizada por conseguir el mayor número de clics. Mientras Denton buscaba construir una comunidad de fieles a sus exclusivas impúdicas sobre celebridades y competidores, Peretti era un obseso de la viralidad.
Su antagonismo reconfiguró el espacio mediático digital y creó una cultura de internet que hoy vive sus últimos coletazos. Su ambición desmedida escribió el epitafio de sendos imperios millonarios y dejó por el camino a cientos de creyentes… y el terreno abonado para el auge de los populismos de extrema derecha, que usaron sus enseñanzas para hacerse con la gallina de los huevos de oro: el tráfico.
Preguntas
¿Estamos asistiendo al fin de una era de Internet?
Sí, está bastante claro. Las empresas que auguraron el nacimiento de una nueva generación de negocios informativos a gran escala están comprobando que económicamente no funcionaron como esperábamos, y que las plataformas no eran tan infalibles como parecía. El auge de los nuevos medios digitales estuvo íntimamente ligado a la explosión de las primeras redes sociales.
P – Si pudiera volver atrás, ¿qué cambiaría?
Hay un millón de cosas que hubiéramos hecho de otra manera, claro, pero nuestro mayor problema fue que construimos nuestro medio sobre una dependencia total de redes sociales como Facebook y Twitter, que hoy están en crisis.Esos nuevos medios se dirigían a un público millennial, incluso apelaban a él desde sus titulares.
P – ¿Tiene esta crisis algo de generacional?
Nos hacemos mayores y nuestros intereses han cambiado, claro, pero mi impresión es que la gente simplemente se ha cansado de las plataformas en las que todos hemos desarrollado nuestras vidas durante un tiempo y se ha alejado de ellas para probar nuevos entornos.
Quienes trabajamos en los medios observamos con preocupación el futuro de las instituciones frente a las fuerzas populistas que ayudamos a desatar
En su libro analiza cómo el ecosistema digital pasó de ser un vehículo para las ideas progresistas a una herramienta para la extrema derecha.
P – ¿Siente algún tipo de responsabilidad?
El auge de los populismos de derecha está íntimamente ligado a las redes sociales. Por supuesto, quienes trabajamos en los medios, la política y la tecnología observamos ahora con preocupación el futuro de las instituciones, su unidad y su resistencia frente a las fuerzas que ayudamos a desatar.
Su libro se basa en el enfrentamiento entre dos formas de entender el tráfico en internet: la viralidad frente a la comunidad. Con la perspectiva que da el tiempo,
P – ¿cree que Peretti estaba equivocado?
Creo que su planteamiento era el correcto para un momento y un lugar precisos. Pero ahora las cosas han cambiado y las audiencias han avanzado, así que su fórmula ha quedado obsoleta.Se encuentra ahora en plena construcción de Semafor.
P – ¿Qué lecciones de BuzzFeed puede aplicar a su nuevo medio?
Creo que sobre todo escuchar todo lo que tiene que decir la gente que está descontenta con el periodismo que se hace hoy. Una de las cosas que aprendí sobre mí mismo en BuzzFeed es que no soy un hombre de negocios, soy periodista, así que en este nuevo proyecto me voy a limitar a dirigir la redacción.
En su libro analiza cómo el ecosistema digital pasó de ser un vehículo para las ideas progresistas a una herramienta para la extrema derecha.
P – ¿Siente algún tipo de responsabilidad?
El auge de los populismos de derecha está íntimamente ligado a las redes sociales. Por supuesto, quienes trabajamos en los medios, la política y la tecnología observamos ahora con preocupación el futuro de las instituciones, su unidad y su resistencia frente a las fuerzas que ayudamos a desatar.Su libro se basa en el enfrentamiento entre dos formas de entender el tráfico en internet: la viralidad frente a la comunidad.
P – Con la perspectiva que da el tiempo, ¿cree que Peretti estaba equivocado?
Creo que su planteamiento era el correcto para un momento y un lugar precisos. Pero ahora las cosas han cambiado y las audiencias han avanzado, así que su fórmula ha quedado obsoleta.Se encuentra ahora en plena construcción de Semafor.
P – ¿Qué lecciones de BuzzFeed puede aplicar a su nuevo medio?
Creo que sobre todo escuchar todo lo que tiene que decir la gente que está descontenta con el periodismo que se hace hoy. Una de las cosas que aprendí sobre mí mismo en BuzzFeed es que no soy un hombre de negocios, soy periodista, así que en este nuevo proyecto me voy a limitar a dirigir la redacción.