Las protestas del exilio y en las calles de Caracas mantienen el pulso contra Nicolás Maduro, aunque inevitablemente se han visto condicionadas por el endurecimiento de la abyecta represión chavista.
NotMid 02/12/2024
EDITORIAL
Las movilizaciones secundadas ayer en todo el mundo en favor de la libertad de Venezuela inician la cuenta atrás para que Edmundo González pueda tomar posesión como presidente el próximo 10 de enero. Las protestas del exilio y en las calles de Caracas mantienen el pulso contra Nicolás Maduro, aunque inevitablemente se han visto condicionadas por el endurecimiento de la abyecta represión chavista. Ante la firmeza de la oposición tanto para exigir la liberación de los presos políticos como para hacer efectiva la investidura presidencial, el régimen ha intensificado la persecución. A la alerta roja elevada por Maduro ante la Interpol en contra de Edmundo González, se suma el asedio a la embajada argentina en Caracas, refugio de opositores, y a la residencia de la madre de la líder María Corina Machado.
La violencia chavista, tras el fraude electoral perpetrado por Maduro, exige pasos contundentes de la comunidad internacional. El propio Edmundo González ha pedido a España que reconozca su condición de presidente electo, tal como ha hecho EEUU. En la concentración de Madrid, el exilio exigió ayer a la Corte Penal Internacional que emita la orden de captura contra Maduro. La determinación de la oposición democrática constituye un mensaje de esperanza en una causa que debe avanzar hasta el final.