Max Verstappen sumó su tercera victoria consecutiva en Suzuka y, a la vez, su tercera victoria de la temporada. El neerlandés no dio opción, ni siquiera a su compañero de equipo, segundo. Carlos Sainz alargó su racha y consiguió su tercer pódium del año.
NotMid 07/04/2024
DEPORTES
Suzuka y Max Verstappen siguen con su idilio particular. El piloto de Red Bull, otra vez más, estuvo imparable en el circuito japonés y no dio opción a ningún piloto en las 53 vueltas de la carrera. El neerlandés, cómo no, es líder destacado del Mundial.
La carrera estuvo marcada por las altas temperaturas en pista, que condicionaron completamente las estrategias durante la prueba. El exceso de degradación en los neumáticos fue algo que los equipos no esperaban de forma tan acusada.
Los pilotos españoles volvieron a estar brillantes, manteniéndose firmes en el Top 5 y, como en el caso de Sainz, aupándose a la tercera posición del pódium. El madrileño solo faltó una vez a su cita con el cajón, y fue justo la carrera en la que tuvo que ser operado de apendicitis. Alonso, sexto, volvió a exprimir su Aston Martin al máximo.
Bandera roja nada más empezar
La salida se produjo sin problemas y sin adelantamientos entre los nueve primeros pilotos, en los que destacaba Fernando Alonso con el neumático blando (el resto, con medios). Sin embargo, la cosa fue bien diferente en la parte de atrás .
Hubo más caos en las primeras curvas en la segunda mitad de la parrilla, hasta el punto que Alex Albon y Daniel Ricciardo se tocaron antes de la tercera curva y acabaron contra las protecciones.
La bandera roja detuvo la carrera durante media hora, tiempo necesario para arreglar el desaguisado causado por estos dos pilotos, que pudieron no obstante bajarse de sus monoplazas sin problemas.
Los Mercedes apuestan por el duro
Cuando los pilotos volvieron para la segunda salida desde la parrilla, los Mercedes sorprendieron al cambiar sus neumáticos por el compuesto duro. ¿Se arriesgarían a ir a una sola parada?
De nuevo mucho respeto entre los pilotos de arriba, en un primer sector muy rápido y en el que apenas hay espacio entre la parrilla y la primera curva. A partir de ahí, a jugar con la gestión de las ruedas.
Las paradas empezaron pronto: Alonso, por ejemplo, paraba en la vuelta 13 para montar el neumático medio; Norris lo haría y cambiaba al duro, realizando un ‘undercut’ a Sergio Pérez, que tardó más en entrar.
Fue entonces cuando empezamos a ver los primeros adelantamientos en la parte alta por la diferencia de neumáticos y vueltas, ya que los dos Mercedes y Charles Leclerc, este último con el medio, aguantaron más tiempo en pista. El resto de pilotos, según iban poniendo a tono los compuestos nuevos, iban rebasándolos en pista.
Estrategia ‘rara’ en McLaren
Los Mercedes pararon de nuevo en boxes para montar de nuevo el compuesto duro, lo que dejaba un claro mensaje (difícil) de intentar llegar hasta el final. También lo podía intentar Charles Leclerc, que tras salirse de pista y ser atacado por Norris, paró en la vuelta 27.
Sorprendentemente, el piloto británico de McLaren también era llamado a boxes: en su caso, la segunda parada, lo que le relegaba a la octava posición. En ese momento, Carlos Sainz se colocaba en posiciones de pódium, a más de 5 segundos de Sergio Pérez, a 15 segundos de un intratable Max Verstappen y 7 segundos por delante de Fernando Alonso, cuarto.
Lejos de conformarse con la tercera posición, Carlos Sainz apretó a cada vuelta que pasaba y pasaba a recortar tiempo con Sergio Pérez. Así hasta que empezaron a llegar las segundas paradas en boxes a partir de la vuelta 33.
Los pilotos se vuelven a mezclar
El primero en parar fue Oscar Piastri, que a la postre empezaría a acercarse y a acechar a un Fernando Alonso que entró solo una vuelta después para cubrirse del australiano. Sergio Pérez también paraba y, aunque volvía a ceder con Norris, no tardaba en recuperar la posición.
Verstappen entraba en boxes en la vuelta 35, con el codo ‘fuera de la ventanilla’. Sainz lo hacía en la 37 y perdía cuatro plazas, pero recuperables: con los dos Mercedes no tuvo ningún problema, el reto sería adelantar a Norris y a su compañero Leclerc, con unos neumáticos más viejos.
Los pilotos de Mercedes pararían definitivamente para montar un último compuesto medio, y ya todos enfocados hacia el final de la carrera. Tan solo un ‘susto’ de Logan Sargeant, que se salió de pista y regresó marcha atrás, y la remontada de Sainz pusieron algo más de pimienta al último tercio de carrera.
Carlos Sainz recupera la posición de pódium
Poco a poco, el madrileño iba recortando tiempo a Norris y a Leclerc. La diferencia de neumáticos era brutal y no tardó en adelantar a sus rivales, de forma que pudo recuperar su posición de pódium en la vuelta 46. ¿Ahora a por Pérez? La diferencia de 9 segundos parecía demasiado, pero el español empezaba a apretar.
Fernando Alonso lograba mantener a raya a Piastri, pero sin opción de poder mirar hacia arriba: Norris y Leclerc estaban demasiado lejos. Sin embargo, las últimas 4 vueltas volvieron a estar cargadas de emoción, ya que los Mercedes, con neumáticos medios, se acercaban.
Russell atacaba a Piastri en la chicane final y se tocaban, hasta el punto de que el australiano tuvo que saltársela para evitar un accidente. Finalmente el británico lo lograría, pero ya en la última vuelta, lo que le permitió a Alonso respirar y asegurar la sexta posición. Por detrás el piloto local Yuki Tsunoda terminaba puntuando delante de su público.
El banderazo a cuadros llegó y Max Verstappen apareció de nuevo en la realización televisiva. El líder del Mundial tuvo una carrera tranquilísima, sin problemas, sin incidentes, marcando su propio ritmo y sin dejar opción a ninguno. Muy al estilo de lo que ha hecho estos tres últimos años.
Aunque la próxima carrera del Mundial vuelva a ser en el Lejano Oriente, en China, los pilotos y los equipos se tomarán dos semanas de descanso antes de volver a la acción. La F1 regresa al circuito chino y allí se disputará la primera carrera al Sprint del año con el nuevo formato para este 2024.