El Kremlin dice tener una “grave preocupación” por los hechos cerca de los límites territoriales rusos y señaló que se requiere “más esfuerzo” para detener la presunta incursión ucraniana
NotMid 23/05/2023
MUNDO
El gobernador de la región rusa de Belgorod, fronteriza con Ucrania, Viacheslav Gladkov, reportó este martes varios ataques con drones durante la madrugada contra dos edificios residenciales y uno administrativo, en medio de la operación antiterrorista en marcha, según Rusia, por la incursión la víspera de saboteadores.
“En Gráivoron dos edificios residenciales fueron atacados por drones. Como resultado del lanzamiento se incendiaron. No hubo víctimas”, escribió el jefe de la región de Belgorod en su cuenta de Telegram.
Gladkov, añadió, que en la aldea de Borísovka, “se lanzó un artefacto explosivo desde un dron sobre un edificio administrativo”. Tampoco en este caso hubo víctimas, recalcó Gladkov, quien explicó que sí resultó dañado el techo de una casa.
Resulta imposible por el momento verificar de forma independiente quién estaba detrás de los ataques o cuál era su objetivo. La desinformación ha sido una de las armas en estos 15 meses de guerra.
Según informó, se está realizando la evacuación de civiles en nueve pueblos cercanos a la frontera. “Los trabajos de limpieza continúan en las zonas afectadas”, declaró el gobernador.
El gobernador de la región de Belgorod, Viacheslav Gladkov (Sputnik/Reuters)
Según Gladkov, una anciana murió durante la evacuación del lunes y otras dos personas resultaron heridas “en los asentamientos en los que entró el enemigo”. Eso elevó a 10 el total de heridos en el ataque. Las fuerzas rusas seguían peinando la zona.
“Ahora hago un llamamiento a los residentes del distrito de Graivoron, que (…) abandonaron temporalmente sus hogares, aún no es posible regresar”, dijo Gladkov.
Declaración de Moscú
Por su parte, el Kremlin expresó “grave preocupación” por los hechos cerca a la frontera y señaló que se necesita “más esfuerzo” para detener la presunta incursión.
“Se ha abierto una causa penal por un ataque contra asentamientos en la región de Belgorod”, declaró en un comunicado el Comité de Investigación ruso, encargado de investigar casos importantes.
A su vez, el jefe de la compañía de mercenarios Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, elogió la labor de los guardias fronterizos rusos de la región de Belgorod, pero arremetió contra el Ministerio de Defensa, habitual blanco de sus críticas.
“¿Dónde estaban los militares cuando irrumpió el grupo de sabotaje y reconocimiento? Esta es una gran pregunta que debe hacerse la jefatura del departamento militar”, dijo en un audio publicado en su canal de Telegram.
Un representante del Directorio de Inteligencia Militar de Ucrania aseguró la víspera a la prensa que detrás de esos ataques están dos grupos de voluntarios rusos que combaten contra el Kremlin: el Cuerpo de Voluntarios Rusos y la Legión Libertad para Rusia.
El objetivo principal de esas incursiones sería crear una “zona de seguridad” que proteja a los civiles ucranianos de los bombardeos rusos.
La Presidencia ucraniana se desvinculó de la incursión en territorio del país vecino.
El Ministerio británico de Defensa consideraba “muy probable” que las fuerzas de seguridad rusas hubieran chocado con partisanos en al menos tres lugares en Belgorod.
“Rusia enfrenta una amenaza de seguridad multidominio cada vez más seria en sus regiones fronterizas, con pérdidas de aeronaves de combate, ataques con bombas caseras sobre vías ferroviarias y ahora acciones directas de partisanos”, indicó en un tuit el Ministerio.
Agencias