Si siete millones de euros, 1.200 millones de pesetas, no son pruebas de que el Barça pagaba para obtener favores arbitrales, ¿qué lo serán?
NotMid 13/03/2023
OPINIÓN
FEDERICO JIMÉNEZ LOSANTOS
Sobre corrompidos, tercos; y sobre trincones, porfiados. Los pillan con las manos en la masa y se las dan de artistas panaderos. Me encanta el último argumento del parvulario azulgrana de árbitros, antes Colegio, contra los que denuncian una estafa que ha adulterado 20 años de fútbol español. Dicen los castellers del pito que la Fiscalía no tiene pruebas… de las pruebas de corrupción del Barça. Si siete millones de euros, 1.200 millones de pesetas, no son pruebas de que el Barça pagaba para obtener favores arbitrales, ¿qué lo serán? Pero todos sabemos, desde que Relaño explicó el villarato, que el dinero no se daba en sobres sino en forma de ascensos con sueldo, partidos y condenas a la nevera o al bressol.
Entre los juristas de la incorruptibilidad natural de la casta arbitral, destaca Iturralde, tosco antimadridista, que ha relevado a Medina Cantalejo en la prédica de que no hay ni habrá pruebas… de las pruebas que hay. Desde la Ser insulta a Real Madrid TV por un reportaje sobre Clos Gómez, que, gracias a la protección del Col.legi, sobrevivió a su incapacidad técnica (nunca prosperó en Europa, igual que Iturralde), pero perjudicó al Madrid y logró que el Barça no perdiera jamás con él. Hoy manda en el VAR de Roures, copropietario del Barça. ¿Conflicto de intereses? ¡Ca! Iturralde, llama «vendido a su jefe» al profesional que en la tele del Real Madrid hizo un resumen de las hazañas de Clos. Temo que no entiende la diferencia entre sueldo y soborno.
Veamos: Negrerira era el hombre fuerte de los árbitros, que por eso le pagaban y por su eficacia Laporta le cuadriplicó el sueldo. Y, desde el palco del Barça, según ha dicho Roures (que va a por Laporta) valoraba la actuación de los árbitros que antes se había llevado con su hijo a comer. ¿Y eso no es corrupción arbitral?
Iturralde, como Cantalejo y Clos, no tiene nada que agradecerle a nadie. Dicen las ratas de YouTube que empezó su carrera -17 años en Primera- un año después de llegar al poder Negreira y Arminio. Y que es el segundo árbitro que más ha pitado -y cobrado-, pese a que en Europa no pasó de meritorio en fase de grupos. Daba igual. El mérito era otro. Y hay millones de pruebas.