Esta es la Champions de Ancelotti, maestro de maestros; la de Benzema, máximo goleador del torneo; la de Vinicius, aliado de Karim; la del héroe Rodrygo; la de Courtois, Modric, Marcelo… y la de Florentino, que iguala a Bernabéu.
NotMid 28/05/2022
DEPORTES
Abran los ojos. No es una película de ciencia ficción. Ha ocurrido. Es real. Sí, es el Real Madrid. Esta Champions será recordada como la más épica, emotiva y milagrosa de las 14 que ha ganado el club más laureado de todos los tiempos. PSG, Chelsea, Manchester City y Liverpool pueden dar fe de todo ello. La entereza de este equipo ha quedado también demostrada en París, superando todo tipo de dificultades hasta hacerse con esa Orejona que ha tenido un sabor especial por cómo se construyó y, por qué negarlo, por haberlo logrado delante de las narices de Mbappé, que ha pasado de ser objeto de deseo de los madridistas a jugador denostado y repudiado por esa afición blanca que durante la final se acordó de él en varias ocasiones…
Esta es la Champions de Ancelotti, el maestro de los maestros en el banquillo. Solo él tiene cuatro Copas de Europa como técnico, dos en el Milán y dos en su Real Madrid. Su mano izquierda, su inteligencia para manejar la presión y su química con el vestuario han sido claves en la capacidad de este equipo para superar todas las dificultades que fueron apareciendo sobre el camino. Por supuesto, también es la Champions de Benzema. El máximo goleador del torneo y el artífice de las eliminaciones del PSG (hat-trick en el Bernabéu) y el Chelsea (hat-trick en Stamford Bridge y gol decisivo ante los ingleses en la prórroga del Bernabéu). A sus 34 años se ha echado el equipo a la espalda y ha sido el MVP de esta 14 que sabe a gloria. Tampoco olvido a Vinicius, el aliado de Karim en esas fantasías que han maquinado arriba para derribar a todos los que se han puesto por el camino. Así como su compatriota Rodrygo, héroe ante el Chelsea, con ese 1-3 que forzaba la prórroga, y sobre todo ante el City, con ese doblete en 89 segundos que obró el milagro para poder estar en Saint-Denis. Y me pongo de pie si hablo de Luka Modric, que a sus 36 años ha sido el cerebro del campeón, o de Courtois, ese muro que por fin logró su primera Orejona.
Y no olvido a Florentino Pérez. Con sus 6 Copas de Europa iguala el registro del legendario Santiago Bernabéu, de cuya muerte se cumplirán 44 años este jueves. Florentino se ha puesto a la altura de Bernabéu, un logro que parecía quimérico cuando accedió a la presidencia el 17 de julio del año 2000. Este es el Madrid, UN CLUB SIN LÍMITES PARA ALCANZAR SUS SUEÑOS.
Un campeón contra viento y marea
El camino del Real Madrid hacia París no ha sido fácil. Los de Ancelotti tuvieron una fase de grupos relativamente asequible, con el Inter como principal hueso. Aunque la clasificación se nubló con la derrota ante el Sheriff en el Bernabéu, acabó sellando el pase a octavos en la penútlima jornada. Los sorteos de los cruces no le fueron benévolos. Bueno, lo fue uno, el que le emparejó con el Benfica en octavos de final que hubo de repetirse por un error garrafal de la UEFA en el procedimiento del sorteo. En el definitivo salió el PSG y luego se cruzaron en su camino Chelsea y Manchester City. El Madrid se deshizo de todos ellos para llegar a París en una Champions en la que el Bernabéu exacerbó el espíritu de las noches de las grandes remontadas europeas.
Benzema entra en el Olimpo
“Vine para esto, para ganar la Champions League”. Este fue el mensaje que lanzó Benzema al planeta fútbol pocos días antes de la gran final de París. Era una especie de contestación a Mbappé, un discurso elegido después de que su compatriota del PSG prefiriera los petrodólares antes que la gloria de la historia de la entidad blanca. Una leyenda de la que se ha escrito un capítulo más con la victoria de la 14ª Copa de Europa ante el Liverpool (en las últimas cinco, con participación directa del madridista). Benzema ha sido claramente el hombre de la competición esta temporada. Primero hizo una fase de grupos espectacular en la que consiguió marcar cinco goles en los cinco encuentros que disputó (sólo se perdió el último de esa fase, ante el Inter, por lesión). Pero en las eliminatorias siguió su lección magistral: diez goles en los seis partidos disputados hasta la final. Se plantó en París habiendo marcado 15 goles y persiguiendo un récord que parecía inalcanzable, los 17 que hizo Cristiano Ronaldo en la edición de la temporada 2013-14 en la que el Madrid alzó la Décima.
Benzema es, por méritos propios, candidato firme a ganar el próximo Balón de Oro. Ni siquiera habrá que esperar a lo que suceda en el Mundial de Qatar porque la gala se celebrará el 17 de octubre. Ganador de LaLiga, de la Champions, máximo anotador en ambas competiciones… El delantero francés ha marcado 44 goles en los 45 partidos que ha disputado esta temporada, la mejor suya en la historia, cosechada a los 34 años de edad. Para terminar con un año tan mágico Benzema ha puesto la guinda al pastel al igualar los 323 goles en el Real Madrid que consiguió un mito del madridismo, Raúl. Es también el extranjero con más partidos en el Madrid (604). Es, en realidad, historia pura del mejor equipo del mundo y queda Karim para rato: tiene contrato hasta 2023 y será fácil que juegue hasta que quiera en el Bernabéu si mantiene el nivel.
Ancelotti es Mr Champions
El mismo año que ha conseguido ser el primer entrenador que gana las cinco grandes Ligas (España, Inglaterra, Alemania, Italia y Francia) lo ha coronado siendo el primero que gana cuatro Copas de Europa. Un póker de ases, no hay mano que le supere. Es Carlo Ancelotti, el técnico que aunque ha atravesado momentos de zozobra en su regreso a Chamartín, como ese Clásico en el Bernabéu, ha terminado manteado en París y a la espera de otro nuevo puro que fumarse en Cibeles. Carletto es el alma colectiva de este Real Madrid, el pegamento que une a veteranos como Benzema con noveles como Vinicius, el que usa su ceja como pararrayos cuando vienen mal dadas y su humor cachazudo cuando hay que echar balones fuera.
Ancelotti ha ganado 39 de los 56 partidos que ha disputado el Madrid esta campaña y París culmina la obra que empezó a esbozar con la Supercopa de Arabia, fue desarrollando con una Liga incontestable y ha terminado convirtiendo en epopeya inmortal con esta Champions de los milagros que empezó con un costalazo impresionante contra el Sheriff del que nadie se acuerda ya. Porque luego vinieron el PSG, el Chelsea, el City y el Liverpool. Clubes-estado, el anterior campeón de Europa y también otro de los mejores exponentes de la vieja aristocracia europea. Uno tras otro, Pochettino, Tuchel, Guardiola y ahora Klopp (los tres últimos, técnicos que saben lo que es ganar la Champions), Ancelotti se ha sobrepuesto como el rey de reyes de los banquillos. Esta cuarta orejona le permite superar a Bob Paisley y Zinedine Zidane en el palmarés. Para Carletto, en el global, es el título 23 de su exitosa carrera como entrenador y el número 37 si añadimos los que conquistó antes como calciatore. Este de París, contra el Liverpool que le amargó la vida en Estambul, tiene un añadido épico que ha calado en el madridismo, con el que ha conectado también en la manera en la que ha ido dando protagonismo en el tramo final de la competición a Valverde, Camavinga y Rodrygo para edificar una columna vertebral que puede dar más Champions en el futuro.
Fue una de las imágenes del éxtasis tras la remontada, la tercera, la del City. Ancelotti yendo a los brazos de Florentino con un “Gracias por traerme”. A la gran mayoría del madridismo seguro que le gustaría, ahora, poder responderle con un “Gracias a usted por venir, míster”.
Florentino iguala a Bernabeu
El legado de Santiago Bernabéu en el Real Madrid es imborrable. Su figura y su modelo de gestión han sido inspiradoras para Florentino Pérez en pos de revalidar el título de Mejor Club del Siglo que la FIFA le concedió en el XX. Con la Decimocuarta, el actual presidente, que va camino de sumar veinte años de mandato entre sus dos etapas, iguala a Bernabéu con seis Copas de Europa, el título que mueve el espíritu competitivo de la entidad blanca. Florentino va camino de sumar veinte años de mandato entre sus dos etapas. Conquistó la Novena en su segunda temporada, con la inolvidable volea de Zidane al Leverkusen en Glasgow. Después de su paréntesis en la presidencia, reconstruyó el equipo y en 2014 llegó la ansiada Décima, preludio de las tres Champions consecutivas que llegaron entre 2016 y 2018.
Esta sexta Champions es el 51er título en el palmarés de Florentino Pérez. La sección de fútbol ha ganado otros 23: 6 Ligas, 5 Mundiales de Clubes, 4 Supercopas de Europa, 2 Copas del Rey y 6 Supercopas de España. La sección de baloncesto ha ganado 22: 2 Euroligas, 6 Ligas, 6 Copas del Rey, 7 Supercopas de España y una Intercontinental. Títulos, figuras y estadio. El futuro del club pasa por el nuevo Bernabéu, que cuando acaben las obras se convertirá en un vanguardista y multifuncional recinto capaz de acoger todo tipo de eventos. Una palanca de ingresos para fortalecer el porvenir de la entidad y afrontar nuevos retos desde la herencia de las 14 Copas de Europa que albergará en su museo.
Courtoise guardian de acero
Es inevitable no recordar, en este momento, que la revista FourFourTwo no lo metió ni entre los diez mejores porteros del mundo. Y que la temporada pasada no estuvo nominado al FIFA The Best en la categoría específica para porteros y en el Trofeo Lev Yashin de la gala del Balón de Oro, que otorga France Football sólo fue octavo. Este año va directo a por ellos, a modo de vendetta personal. “Sólo les importa el dinero, no somos robots”, dijo en alusión a UEFA y FIFA tras el partido del tercer y cuarto puesto de la pasada Nations League. Unas duras declaraciones que, para muchos, le costaron la candidatura a los premios individuales. Este año quedan pocas excusas.
El reino de Vinicius
El salto cualitativo de Vinicius le ha catapultado a todos los niveles. Hoy por hoy es, con diferencia, el jugador brasileño más influyente. No sólo lo es en el juego, sino también en el mercado. La web especializada de referencia Transfermarkt le da un valor de 100 millones de euros. Es el tercero del mundo después de los 160 en que se cotiza Haaland o los 150 de Mbappé. Y ha confirmado Vinicius el sorpasso a Neymar, que ahora tiene un valor de mercado de 90 millones. Por detrás de Vinicius, en cuanto a los brasileños, ya hay un escalón hasta Marquinhos, central del PSG, que es el tercero más cotizado con 75 millones de euros. Con respecto a ese sorpasso a Neymar del que tanto ha de hablarse antes del Mundial de Qatar, Vinícius destaca por mucho. Esta temporada ha contribuido a generar con sus acciones ofensivas, defensivas y en la construcción de juego casi 19 goles más de los esperados para el Madrid. Esto en Liga, que son los datos de Inteligencia Artificial que facilita Olocip. Por su parte, Neymar ha contribuido a generar 9 goles más de los esperados para el PSG. El Real Madrid pagó 45 millones de euros por Vinicius. Parecía caro en sus tres primeras temporadas, en las que sólo pudo marcar 15 goles (entre las tres) y parece muy barato en esa última, su cuarta, en la que ha anotado 21 goles entre todas las competiciones y dado 20 asistencias. Si ha sido la Champions de Benzema, también ha sido la de Vinicius… y la conexión entre ambos ha sido letal.
Rodrygo, el otro héroe de la catorce
Que no engañe su cara de niño. Tampoco sus 21 años. Rodrygo Goes esconde alma de veterano bajo su inocente sonrisa. De goleador veterano. Ese que ajusticia cuando la soga más aprieta. La Decimocuarta, sin su carácter reactivo, sentido de la oportunidad y tino, hubiera sido quimérica. Una competición que ya apuntaba a hacer suya con el recordado hat-trick al Galatasaray en su primer año. Este curso ya oposita a ganarse el apelativo de Mr. Champions. No solo por sus cinco tantos, sino por el cómo, el cuándo y el dónde.
El primero sirvió para empezar con el pie correcto ante el Inter (0-1), el segundo para apuntarse a la fiesta contra el Shakhtar (0-5) y el resto para inscribir su nombre en el libro de hazañas de la Liga de Campeones. Esperó hasta la vuelta de cuartos para volver a mojar. Cuando más se torcía el gesto frente al Chelsea, quitó el envoltorio a un caramelo de Modric y permitió que Benzema cerrase la contrarremontada en la prórroga. La explosión definitiva llegó contra el City. En dos minutos de combustión, entre el 89′ y el 91′, convirtió a los de Guardiola en ceniza. Un gol de oportunista y un cabezazo de puro 9. Karim abrocharía la titánica hazaña. Una más en una Champions de documental. Benzema y Modric no se han quitado la capa en todo el curso, pero el madridismo tiene un nuevo héroe: Rodrygo, el otro héroe de la 14.
Marcelo el capitán de los 25 títulos
A partir de ahí Coentrao se cayó de la ecuación y el brasileño pasó a ser titular indiscutible, como pudo constatarse en las finales de Milán en 2016 (también ante el Atleti, metiendo uno de los goles de la decisiva tanda de penaltis), la final de Cardiff en 2017 (dio la asistencia a Asensio en el 4-1 a la Juventus) y en la final de 2018 en Kiev, precisamente ante el Liverpool de Klopp. En las tres últimas fue titular y se consagró como uno de los mejores laterales zurdos del mundo. En los dos últimos cursos, tras la llegada de Mendy, ha ido perdiendo peso en el equipo. Pero el verano pasado cambió de preparador físico personal. Modificó su nutrición y consumó un cambio que le ha hecho rendir con brillantez y honradez cuando le ha tocado remar en el campo. Marcelo se va del Real Madrid con el premio añadido de ser, con estos 25 títulos, el jugador de la historia del club con mejor colección de trofeos (Gento se queda con 23). Marcelo se va por la puerta grande. Imposible no quererle.
Modric, el mago
Abase de fútbol, Modric ha demostrado que 36 años (37 dentro de cuatro meses) no son nada. Sus números en esta Champions han sido superlativos y su rendimiento a la altura de aquel 2018 que le impulsó para alzar al cielo un Balón de Oro. Ha jugado en los 13 partidos de la edición, siendo el timón del campeón, el capitán del barco. Ejerciendo su papel de eje entre la salida de balón y la llegada al área rival. Esto se ejemplifica en que de los casi 800 pases que ha dado esta Champions, el 61% han sido en campo rival, por un 39% en el propio. Ha tenido un acierto del 91% en sus entregas, dando casi 1.000 toques al balón y 4 asistencias. Una excelsa: su pase con el exterior para que Rodrygo forzase la prórroga ante el Chelsea. Defensivamente ha tenido un 54% de acierto en los duelos, cometiendo sólo tres faltas y viendo una tarjeta amarilla, contra el Manchester City.
El croata ha sido uno de esos veteranos que Vinicius señalaba capaz de transmitir “tranquilidad” en los momentos más delicados. Y esta Champions le ha elevado al olimpo de la competición, igualando a Cristiano, Maldini y Costacurta (y a algunos de sus compañeros), como el jugador con más Orejonas en la historia. Ganó en Lisboa, en Milán, en Cardiff, en Kiev… Y ahora en París. Cinco, ya tiene cinco. Y además, gasolina para seguir otra temporada. Incombustible.
Los Nuevos pentacampeones
Pero nadie está por encima de Francisco Gento. El único jugador que puede presumir de poder contar con seis Copas de Europa en su palmarés. El cántabro, fallecido en enero, fue el mejor extremo izquierdo de todos los tiempos. La Galerna estuvo en esa primera gran etapa blanca a la que hay que sumar su título de 1966.
Cerca de Gento, y en el mismo grupo de cinco Copas de Europa se quedaron tres símbolos del Milan: Paolo Maldini y Alessandro Costacurta. Los dos rossoneri ganaron también cinco trofeos de la Copa de Europa (dos con dicha terminología: 1989 y 1990) y tres bajo la denominación de la Champions League (1994, 2003 y 2007). Otro de sus compañeros fue Clarence Seedorf, ganador de la Champions con Ajax, Madrid por partida doble, y Milan, también con dos títulos. Con cuatro aparece otro grupo significativo de jugadores encabezados por jugadores madridistas y del Barcelona: Sergio Ramos y Varane comparten cuádruple corona con los azulgrana Messi, Xavi, Iniesta y Piqué. Como Kovacic y Etoo (ganador con Madrid, Barça e Inter), también con cuatro trofeos en su palmarés.
AS